Curiosidades sobre los elefantes

El elefante es uno de los animales más grandes del mundo y también uno de los más inteligentes. Es uno de los más conocidos, cualquiera ha visto alguno en el zoológico o al menos en la televisión. Pero ese animal tranquilo que se quita las moscas con la trompa en el zoo, tiene muchas curiosidades ocultas que pocos saben. Veamos algunas de ellas.

Para empezar, hay dos géneros diferentes de elefantes, Elephas, que es el elefante asiático o de la India, que en realidad está en muchos países de Asia como veremos. Ese género tiene una única especie viva y muchas subespecies. Luego está el elefante africano nombre científico Loxodonta, que tiene dos especies.

Pero no nos vamos a aburrir con nombres científicos y diferencias nimias, sino que vamos a las curiosidades de los elefantes, uno de los animales más conocido pero más desconocido al mismo tiempo. Ya que hay mucho que no se sabe sobre ellos, y también hay muchos mitos sobre estos inmensos mamíferos.

La trompa

Una de las diferencias que están a la vista entre el elefante asiático y el africano es el tamaño de las orejas, el de Asia las tiene mucho más pequeñas. Pero hay otras diferencias, por ejemplo la trompa, la africana está mucho más especializada.

Estamos tan acostumbrados a la trompa del elefante, está presente en muchos juegos, pero es poco lo que sabemos de ella. Es muy importante para el elefante, ya que la usa como un órgano exploratorio, para alimentarse, para beber e incluso para luchar.

La trompa del elefante es una fusión entre la nariz y el labio superior, que lo mismo puede rascar el ojo del elefante como arrancar la rama de un árbol. El olfato que tiene a través de ella es excelente, le permite seguir rastros, olfatear el aire en busca de compañeros o peligros, etc. Igualmente no se acerca a la perfección del topo nariz de estrella.

No se usa directamente para beber agua, pero por ella puede absorber hasta cuatro litros, que luego descarga en la boca si quiere beber, o en su cuerpo si se quiere refrescar.

En la punta de la trompa tiene dos proyecciones que son casi como si fueran dedos, que le dan el sentido del tacto al elefante. La trompa completa tiene unos 100 mil músculos individuales. Para que comparen, nuestro cuerpo tiene sólo 639 músculos.

Esto hace que sea tan y más sensible que nuestra mano. Esos dos “dedos” de la punta podría tomar un vaso de cristal sin romperlo, e incluso un vidrio delgado. Pero al mismo tiempo la trompa es tan fuerte como para romper las ramas de un árbol, o para levantar hasta 270 kilos de peso. (Sigue después de la imagen)

Los colmillos

Los colmillos de los elefantes aunque parezca mentira, no son colmillos, o sea que no son dientes caninos, sino que se trata de incisivos. Y son los únicos incisivos que tienen. Aunque parezcan diferentes a un diente común, no lo son, la única diferencia es que son muy grandes.

Los colmillos comienzan a crecer a los 2 o 3 años de edad, y lo siguen haciendo durante toda la vida del elefante. Por eso los más ancianos son los que los tienen más grandes, si es que no tuvo algún accidente en el transcurso de los años. Crece entre 15 y 18 centímetros por año.

En los elefantes africanos tanto las hembras como los machos tienen colmillos, pero en los elefantes asiáticos los de las hembras son muy pequeños, tanto que no llegan fuera de los labios, y no todos los machos los tienen grandes.

Los elefantes los usan para escavar, para arrancar la corteza de los árboles, para alimentarse, levantar peso, o como armas.

Algo curioso es que los elefantes tienden a usar un colmillo más que el otro, el paralelo humano a ser diestro o zurdo.

Las orejas y su extremadamente fino oído

Las orejas de los elefantes tienen diferentes funciones. Ya dijimos que en los africanos son más grandes que las de los asiáticos, exactamente tres veces más grandes. Pero lo interesante es que son el órgano a través del cual se comunican más, ya que depende cómo las mueven o colocan son señales para el resto de la manada. También sirven para regular la temperatura corporal.

Son muy suaves y sensibles, y potencian el sentido del oído en los elefantes. Tanto que pueden escuchar infrasonidos, o sea de muy baja frecuencia, algo que nosotros no podemos hacer. Por ejemplo los elefantes pueden oír 15 Hz a 4 km de distancia. Así se pueden comunicar entre manadas a kilómetros de distancia, advirtiéndose de peligros inminentes.

Según estudio recientes los elefantes pueden comunicarse entre sí, enviando y escuchando llamados en un rango de 50 kilómetros cuadrados. Al parecer prefieren hacer sus llamados por la tarde, que tiene su explicación, ya que es el mejor momento para transmitir el sonido.

Pueden llegar a reconocer las llamadas de hasta 100 individuos diferentes, lo que confirma el dicho popular de que el elefante tiene muy buena memoria. (sigue después de la imagen)

Otras curiosidades

Los elefantes están entre los animales más inteligentes de la naturaleza. Tienen el cerebro más grande de los animales terrestres, si bien en proporción al tamaño de su cuerpo es más pequeño que el nuestro. Pero la inteligencia se demuestra por su forma de comunicarse, porque demuestran altruismo, también pesar cuando pierden a un compañero de manada, incluso se cree que hacen música. Juegan, y utilizan herramientas.

El color de su piel es gris oscuro, pero por lo general suele tener diverentes tipos de colores ya que se la pasan arrojándose tierra sobre sus cuerpos, o revolcándose, para refrescarse, entonces suelen mostrar el color del suelo de la zona.

La creencia popular es que los elefantes no tienen pelo, pero sí lo tiene, sólo que muy disperso, aunque lo tienen abundante en la punta de la cola, pelos que pueden llegar a medir un metro de largo.

Los pies de los elefantes tienen un diseño tal que sólo apoyan la punta de sus dedos, ya que esencialmente caminan sobre un tejido duro y grasoso. Son casi redondos. Este tejido esponjoso absorbe el peso del elefante al grado de permitir que se muevan muy silenciosamente. Tienen cinco dedos, pero sólo tres tienen uñas.

Sus piernas no son menos especiales, ya que tienen cuatro rodillas, al contrario de la mayoría de los mamíferos cuadrúpedos que sólo tienen dos. Otra curiosidad es que no pueden saltar, ni galopar, ni trotar, sólo caminar más rápido. Pero sí se pueden parar sobre sus patas traseras (imagen final).

Gracias a estos pies y las piernas pilares, los elefantes pueden permanecer parados todo el tiempo que quieran, es muy raro que se recuesten a no ser que estén enfermos o para dormir.

Los elefantes tienen un embarazo que dura 22 meses.